En los tiempos que corren nos hemos acostumbrado a utilizar nuestro teléfono móvil para prácticamente cualquier cosa, desde relacionarnos con otras personas mediante aplicaciones como WhatsApp, ver fotografías y vídeos, hasta hacer búsquedas en Internet. De hecho, Google ya puntualizó que desde hace poco más de un año más de la mitad de las búsquedas que recibe vienen a partir de otros dispositivos móviles, mientras que antes se realizaban mediante un ordenador. En PlusTecno ya hablábamos de si un teléfono móvil puede afectar o no a la calidad del sueño, pero la cuestión no queda ahí, sino que los estudios afirman que dormir cerca de un terminal puede ser perjudicial para nuestra propia salud.
Cualquier dispositivo emite radiaciones que en exceso son nocivas para la salud. En este caso la Organización Mundial de la Salud ya alertó hace tiempo del problema que suponen en este sentido los teléfonos móviles. La razón es sencilla, nuestro cuerpo, en concreto nuestros órganos, funcionan gracias a energía, pulsos eléctricos, con lo que al exponerlo a radiaciones podemos alterar este funcionamiento en cierta medida. En la calle convivimos con una gran cantidad de radiación, por ello no conviene aumentar esto diariamente durante el sueño, que es cuando nuestro cuerpo más necesita ese descanso.
Según la Organización Mundial de la Salud, existen numerosos estudios que demuestran las evidencias de lo nocivas que son estas radiaciones a la hora de conciliar el sueño, llegando a incrementar las opciones de padecer enfermedades graves, por ejemplo, el cáncer. Además, la proximidad del teléfono móvil a la cama afecta al sistema nervioso, haciendo que una parte de nuestro cerebro se mantenga alerta de una alarma o notificación, y provocando en muchas ocasiones que el cuerpo no llegue a descansar y aparezcan síntomas como el insomnio o el dolor de cabeza.
Además, si eres de los que no deja el teléfono móvil en la mesilla de noche y directamente lo sitúas debajo de la almohada, desde aquí te recomendamos que corrijas ese mal habito. Muchas personas cargan su terminal mientras éste está sobre la cama, debajo de la almohada, con lo que cualquier fallo eléctrico, subida de tensión o sobrecarga puede provocar quemaduras en la piel y en la almohada, ya que éstas están formadas por componentes inflamables.
Por último, utilizar nuestro teléfono móvil antes de dormir afecta a la calidad de nuestro sueño, ya que la luz de la pantalla y los colores de ésta sobreexcitan a nuestro cerebro haciendo que sea más difícil conciliar un sueño profundo y duradero.
Y tú, ¿duermes cerca de tu teléfono móvil? ¿Sabias ya que era perjudicial para nuestra salud? No dudes en comentarnos todas tus dudas e impresiones al respecto.
¡Y NO DUERMAS CON EL MÓVIL ! QUE TE LO DICE HASTA LA MAMA!