El Banco Santander ofrecerá ahora una pulsera y un adhesivo que permitirán la realización de pagos sin usar tarjetas magnéticas, únicamente siendo necesaria la aproximación a la máquina correspondiente. Estas pulseras, que ya estaban disponibles en España con otro formato y nombre (contactless), llegan ahora a Brasil.
Gracias al uso de la tecnología NFC (Near Field Communication), capaz de transmitir datos de forma segura (comparable a Bluetooth y Wi-Fi, pero más seguro), podremos usar los nuevos dispositivos en el día a día, mostrando únicamente la documentación en el comercio para que nadie que robe la pulsera pueda hacer pagos con ella.
El objetivo es que las personas lo usen en el transporte público, en las plazas de peaje o mientras se hacen ejercicios, según ha indicado Rodrigo Cury, superintendente ejecutivo de Tarjetas de Santander, a g1.
Para que funcionen, es necesario que el negocio tenga una máquina compatible. Lo presentan en Brasil, donde indican que si la compra es menor de 50 reales, no será necesario ni introducir la contraseña. En España el límite es de 20 euros para su Contactless.
De momento la pulsera y el adhesivo solo puede ser solicitada por los clientes con tarjeta Santander Mastercard, directamente en la agencia o por la aplicación Santander Way, con un coste de unos 10 euros para la pulsera y 6 para el adhesivo.